María Gracia Morales Carvajal (11 de noviembre de 1928 – 3 de abril de 1995) mejor conocida como Gracita Morales, fue una actriz española que fue recordada principalmente por su voz inconfundiblemente atípica. Nació en Madrid el 11 de noviembre de 1928. Gracita Morales era hija del empresario del Teatro Calderón. Tenía cuatro hermanos, Ana María Morales Carvajal y Pepito Morales Carvajal, y estaba casada con el pintor canario Martín Zerolo. Estudió danza clásica y española con vocación, pero finalmente fue guiada por la interpretación. Más tarde se dedicó al teatro, donde debutó a los 20 años como meritoria en compañía de Luis Peña y Josita Hernán. Posteriormente trabajaría en las empresas de Antonio Vico, Catalina Bárcena, Ernesto Vilches y Tina Gascó. Durante años se dedicó al escenario y mencionó su participación en el estreno de la obra de Miguel Mihura Maribel y la extraña familia. Meses después interpretó al mismo personaje en la versión cinematográfica de José María Forqué. Su éxito en el teatro la llevó al cine donde debutó en 1954, tuvo su edad de oro en los años 60, liderando carteles de cine con una muy joven Rocío Dúrcal. Comenzó su declive artístico en la década de 1970. Participó en casi un centenar de obras, pero es especialmente recordada por sus interpretaciones en las películas Atraco a las tres, Sor Citroën, Los Palomos, La ciudad no es para mí, Operación Cabaretera y ¡ ¡Cómo está el servicio! A través del tiempo se le dio el personaje de criada o «chacha», donde interpretó un estereotipo entrañable, ingenuo pero peculiar, caracterizado por su voz atípica e inconfundible. Eso no era más que una variación de su verdadera voz. Como dijo Pedro Almodóvar sobre ella, Gracita fue «una de las grandes castas de actores atípicos que hacen las cosas de una manera radicalmente personal». Al final de su vida profesional, fatalmente envuelta en un tipo de papel muy específico, se corrió el rumor de que tenía problemas de memoria. Esa fase se caracterizó por la falta de trabajo y solo pudo aparecer como actriz secundaria en un capítulo de la serie Antena 3 Los ladrones de a la oficina. Se casó el 26 de junio de 1960 con el pintor Martín Zerolo, quien era su único esposo. Se conocieron en las Islas Canarias, en 1952, durante un baile y se casaron después de ocho años de noviazgo. Su unión duró diez años. Ella siempre afirmó que él la dejó y se fue a París, dejándola sola y con grandes problemas económicos, mientras que su sobrina Ana Carvajal culpó al divorcio por los problemas de convivencia causados por la inestabilidad de su tía. El divorcio causó un gran revuelo y su vida y su carácter cambiaron y los testimonios de buenos amigos dicen que no se recuperó por completo. Otra característica de la vida de la actriz fue su amor por los animales, especialmente por su perro Lara, un caniche gris. Gracita Morales murió el 3 de abril de 1995 a la edad de 66 años y sufrió una infección del tracto respiratorio.